El intercambiar ideas con las personas,
especialmente las extrañas, aquellas que no conocemos, esas que encontramos en
el medio del camino, sin quererlo, así porque sí, nos brindan la oportunidad de
conocer distintos puntos de vista, nuevas ideas o inclusive, formas °modernas°
de analizar, comprender, situaciones diversas.
Y cuando ésto ocurre en el transcurso de
un viaje fuera del país en que vivimos, sea cual sea el motivo del mismo,
trabajo, vacaciones o estudio, aumenta considerablemente la posibilidad que se
nos presenta.
En Francia las personas viven en
departamentos o casas de material; por el contrario, en la mayoría de las
aldeas de los países de África, los nativos viven en chozas.
En China es muy común observar cómo la
gente allí, saliva sin problema en las veredas; éste detalle en Singapur, esta
completamente prohibido por ley.
En Italia no se concibe las comidas sin
el acompañamiento de pan; en Tailandia, no se utiliza, es consumido sólo por
los turistas.
En Inglaterra es obvio que se tome
cerveza, whisky, gin, etc.; en Irán las bebidas alcohólicas están fuera de la
ley.
Los ejemplos son infinitos y demuestran
incompatibilidad, rareza y distinción.
Entonces al interiorizarnos sobre la
vida cotidiana de tal o cual persona, es posible que aprendamos sobre sus
costumbres, formas de vida, en fin, quizás un poco distinto o quizás
completamente opuesto a lo que estamos acostumbrados.
También es posible que al palpar de
cerca su modo de vida, reconozcamos que se puede vivir peor y tal vez mejor que
lo nuestro, o por lo menos de otra manera.
¿En que piensa la gente? ¿Qué opina de
la vida? ¿Cómo ven el mundo que los rodea? ¿Qué saben aquellos, sobre el país
donde nosotros vivimos?
Las palabras van y vienen, y si tenemos
suerte tomaremos constancia sobre visiones distintas, nos ayudará a ampliar y
conocer mas a fondo el país que nos tocó visitar.
Aprovechar cada momento de nuestro
viaje, mezclándonos entre la gente, charlando con ellos, nos hará sentirnos
mejor, pues al fin y al cabo, todos vivimos en el mismo planeta,¿ no?
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Es muy importante conocer otros países, otras costumbres. Nuevas formas de expresión y maneras de pensar. Pero todos estamos metidos en la misma olla, quizá nos distinga la distancia del foco de cocción, aunque en realidad entramos por la misma puerta y salimos por el mismo túnel.
ResponderEliminarGracias por exponerlo Beto.
Un fuerte abrazo.
Me encantó tu forma de analizar nuestra entrada y salida del mundo...
EliminarMuy original.!!!
Un abrazo.
B.B.
Este comentario ha sido eliminado por el autor.
ResponderEliminarBrillante articulo y muy reales consejos y ejemplos, algunos por no decir todos desconocidos por mi, por eso te felicito amigo. Suerte.
ResponderEliminarMucho agradezco tu visita, amigazo.
EliminarShalom.
Me educaron a vivir en tolerancia, con diferentes personas de diversas costumbres, ideología, política. En aquel colegio interno no era yo, era el número 212.
ResponderEliminarMe agradó pasar por aquí, ya sabes el sitio común en el cual siempre serás invitado.
Un abrazo literario.
La educación recibida es un salvoconducto o una carga.
EliminarGracias mil por tu visita.
Abrazotes mil...